Este proyecto nació con apenas seis sillas de plástico y un sueño bajo el brazo. Cuatro años después, ese sueño se volvió realidad: abrimos nuestro primer local, gracias al apoyo incondicional de nuestra familia, de amigos que siempre nos empujaron a crecer, y de una comunidad en redes que confió —y sigue confiando— en nuestra calidad, precios y servicio.
¿Por qué “T-puí”?
El nombre original, Tapuy, nace del idioma guaraní como un homenaje a nuestras raíces correntinas. En guaraní, Tapyi significa “hogar”. Lo adaptamos para hacerlo más fácil de pronunciar, y así nació Tapuy.
Con el tiempo, el nombre creció con nosotros. Hoy lo escribimos también como T-puí, conectando con las raíces venezolanas de Miguel. En la Gran Sabana, un tepuy es una montaña majestuosa, de cumbre plana y paredes verticales: símbolo de fuerza, profundidad y origen.
Así crecimos y nació T-puí, una fusión de nuestras dos historias. Una palabra que abraza nuestras raíces guaraníes y venezolanas.
Una marca con identidad, con historia y con alma.
Porque el hogar no siempre es un lugar: a veces, es algo que uno lleva adentro.
